La temperatura en Varsovia

El Tiempo Warszawa-Okecie

viernes, 21 de marzo de 2008

miércoles, 19 de marzo de 2008

Aquí el tiempo está más loco que las cabras...

Hola;

qué tiempo más perro está haciendo... ufff... ayer me levanté con la cabeza empanada, abrí las cortinas y estaba nevando, ohhh... qué bonito podéis pensar... pero luego sales a la calle y con el jodido viento soplador es que se te congela la carita mona que tienes.

Hoy me levanto y lo mismo... nevando... luego pasa una hora y sale el sol... y digo "por fin el sol, mi amiguete el sol", pero pasan los minutos y veo que vuelve a nevar, así sin avisar ni nada... joder qué cambios. Ahora hay nubes en el cielo azul, no nieva, pero puede que dentro de cinco minutos...

Mañana colgaré fotos, besos nublados, Marc

martes, 18 de marzo de 2008

Historia por todas partes...

Hola;

si ayer os contaba sobre la leyenda de Varsovia, hoy quiero hablar un poco de todas las huellas de historia que hay por toda la ciudad. No sé si sabréis pero esta ciudad fue gravemente destruida durante la Segunda Guerra Mundial, especialmente después del alzamientos de la población de Varsovia para recuperar su ciudad. Además, si habéis visto la película El Pianista lo sabréis, aquí hubo un importante gueto judío que fue aniquilado como otros muchos. La ciudad cuenta con varios cementerios.

Hoy en clase, con el primer grupo que tengo, voy a hablarles sobre los aconstecimientos más importantes de la historia de España del siglo XX, después voy a pedirles que me hablen de la historia polaca. Espero que sea un bonito intercambio.

Marc

domingo, 16 de marzo de 2008

La leyenda de Varsovia (1a y 2a partes)

Como cuenta la leyenda, hace siglos que llegaron al Baltico dos sirenas heramas que vivian en las profundidades de los mares. Eran mujeres muy bellas, pero en vez de pies tenian colas de peces. Una de las hermanas decidio nadar mas lejos, hasta los estrechos de Dinamarca, donde se quedo hasta hoy en dia. La podemos ver sentada sobre una roca en la entrada del puerto de Copenhague. La segunda sirena llego a Gdansk, una pequena ciudad en la costa del mar Baltico, desde donde nado rio arriba al curso del Vistula. La leyenda cuenta que precisamente al pie del Casco Viejo actual salio del agua a la orilla arenosa para descansar; el lugar que vio le gusto tanto que decidio quedarse aqui. Los pescadores del lugar, al ver que alguien durante la pesca agitaba las olas de Vistula, liaba sus redes y liberaba los peces, decidieron agarrar al parasito y arreglar el asunto para siempre. Al oir el hermoso canto de la sirena se olvidaron de sus planes y se enamoraron perdidamente de la bella mujer -pez, quien desde entonces cada tarde amenizaba el tiempo de estos con su bellisimo canto. Un dia un mercader rico que paseaba por la orilla del Vistula vio a la sirena. Decidio capturarla y encerrarla para despues poder presentarla en las ferias por dinero. Y asi lo hizo. Con astucia atrapo a la sirena y la encerro en un cobertizo de madera, sin acceso al agua. Las quejas de la sirena las oyo el hijo de un pescador, quien con ayuda de sus amigos la libero por la noche. La sirena, en prueba de su gratitud a aquellos que la habian salvado, les prometio que siempre que la necesitasen ayuda les defenderia. Precisamente por eso la Sirena de Varsovia esta armada con una espada y un escudo para defender a la ciudad.

La leyenda de Varsovia... (1 parte)

Como cuenta la leyenda, hace siglos que llegaron al Baltico dos sirenas heramas que vivian en las profundidades de los mares. Eran mujeres muy bellas, pero en vez de pies tenian colas de peces. Una de las hermanas decidio nadar mas lejos, hasta los estrechos de Dinamarca, donde se quedo hasta hoy en dia. La podemos ver sentada sobre una roca en la entrada del puerto de Copenhague. La segunda sirena llego a Gdansk, una pequena ciudad en la costa del mar Baltico, desde donde nado rio arriba al curso del Vistula. La leyenda cuenta que precisamente al pie del Casco Viejo actual salio del agua a la orilla arenosa para descansar; el lugar que vio le gusto tanto que decidio quedarse aqui.

sábado, 15 de marzo de 2008

Jestem nauchichelem hispanskiego (soy profesor de espanol)

Hola,

ya se decir unas cuantas frases en polaco, estoy muy contento. Se como pedir comida y agua, y empiezo a entender algo. Hoy estaba en el ascensor con una viejecita vecina y la mujer se me ha puesto a hablar en polaco y me ha preguntado algo, yo le he dicho que no hablo polaco (nie muwy po polsku) y ella me ha dicho algo que no he entendido del todo pero si he entendido que me decia algo de Espana, asi que feliz y contento le he contestado ¨yestem nauchichelem hispanskiego¨. Ella me ha mirado con cara de asombro y me ha preguntado algo asi como ¨ah, si¨.

Estoy muy ilusionado, mi amigo Bartek me ha invitado a pasar esta semana santa con su familia, iremos al sur de Polonia, probablemente pasaremos por Cracovia, ciudad que me muero de ganas por ver. Pinta muy bien el viaje.

Bueno, hoy por fin he terminado las clases, abrazos llenos de sueno, Marc

jueves, 13 de marzo de 2008

La canción de Ania

Hola ;-)

el otro día por la noche con mis compañeros de piso, Asha y José María, estuvimos jugando a un juego muy literario. Se trata de que cada uno dice una palabra y entonces escribimos un texto corto donde aparecen estas palabras. Ya sabéis, a mí me encanta escribir poemas cortos, sintéticos, y disfruté de lo lindo. Creo que todos lo pasamos bien, José estaba escribiendo algo cuando se emocionó tanto con lo que escribía que se cayó del sillón, él y el sillón cayeron al suelo, fue una escena muy cómica. Aquella noche necesitaba expresar cosas y me fue genial el juego. De todo lo que improvisé, me gusta especialmente un texto, es una canción, se llama "La canción de Ania" y dice así:

La canción de Ania

Todas las mañanas
Ania sale del cuadro
de la habitación
para ir a jugar con los
perfumes del tocador.

Los límites no existen,
los límites no existen.

El cuadro lo sabe y Ania también.

Todas las mañanas
Ania sale del cuadro
de la habitación
para ir a jugar con los muñecos olvidados.

Los límites no existen,
los límites no existen.

El cuadro lo sabe y Ania también.

Abrazos, Marc